Dinero y Supervivencia: La Energía que Mueve el Mundo

En la vida, gran parte de las interacciones humanas están atravesadas por estructuras de dominación. Nuestra sociedad jerárquica se organiza en niveles, y mientras más alto estés en esa escala, mayor será tu capacidad de influir y, presumiblemente, de sobrevivir.

La dominación puede lograrse de distintas maneras: a través de una inteligencia superior, mediante el engaño, con la fuerza y la violencia… o con un elemento tan cotidiano como poderoso: el dinero.

Un aprendizaje tardío

Durante mi infancia, me enseñaron que el dinero no era importante, que lo fundamental era el conocimiento. Ese fue un dato falso que marcó mis primeros años. Crecí sin preocuparme por cómo generar ingresos, hasta que, con el tiempo, entendí que el dinero juega un papel fundamental en la supervivencia.

Mi padre, un intelectual brillante, nunca comprendió el valor práctico del dinero. Su mayor herencia para nosotros fue el dominio del inglés, adquirido durante nuestra infancia en países de habla inglesa. Ese regalo ha sido invaluable… pero nunca se nos enseñó a generar riqueza material.

En contraste, sociedades como la libanesa, la turca o la estadounidense inculcan desde la niñez la importancia de producir dinero, entendiendo perfectamente que dinero y supervivencia están estrechamente ligados.

El dinero como forma de energía

La energía, en física, se define por su capacidad de generar movimiento: motores, electricidad, fuerza hidráulica… todo lo que impulsa la materia. El dinero es su contraparte en la vida social: mueve personas, decisiones y estructuras.

Un ejemplo histórico lo ilustra bien. John D. Rockefeller, uno de los hombres más influyentes del siglo XX, transformó sus enormes reservas petroleras en dinero. Ese dinero, guardado en bancos, se convirtió en energía potencial: un recurso almacenado, listo para generar movimiento en el momento adecuado.

El dinero, al igual que la energía, puede causar acciones: financiar un proyecto, comprar un bien, acceder a un servicio o resolver una emergencia. Es, en términos prácticos, la herramienta que nos permite interactuar con el mundo y modificarlo.

Dinero, supervivencia y calidad de vida

En nuestra sociedad, el dinero garantiza mucho más que lo básico. Proporciona acceso a:

• Bienes esenciales como alimento y vivienda.

• Atención médica rápida y de calidad.

• Educación de alto nivel.

• Tecnología y recursos informacionales.

• Oportunidades de crecimiento y desarrollo personal.

Incluso influye en aspectos tan fundamentales como la elección de pareja, ya que, desde una perspectiva de supervivencia de la especie, muchas personas buscan en un compañero la capacidad de proveer seguridad y recursos.

Conclusión

Pensar en supervivencia es pensar en energía. Y en nuestra realidad, el dinero es una de las formas más efectivas de energía. No es un lujo, no es un capricho: es un recurso vital que nos permite movernos en el mundo, responder a emergencias y construir un futuro más estable.

Más allá de las creencias con las que fuimos educados, comprender esta relación es clave para vivir con autonomía, seguridad y libertad.